¿FUERZA DE VOLUNTAD?

¿Eres de los que se inscribe en un gimnasio y luego no va? ¿O tal vez eres de los que comienzan una dieta y no la puedes mantener en el tiempo? ¿Te gustaría saber la razón por qué muchas veces haces cosas aun sabiendo de antemano que te perjudicará? ¿O por qué continuas con esa persona que te hace sufrir? Si eres de los que cada primero de enero se propone buenos propósitos que luego no cumples, si no puedes decir no, cuando realmente quieres decir no, esta información es para ti.

Esto se debe a que incorporar nuevos hábitos, le resulta una labor muy agotadora para nuestro cerebro, ya que este, está diseñado para cumplir rutinas con el propósito de ahorrar la mayor cantidad de energía posible. Por consiguiente, la solución para poder alcanzar algún objetivo o resolución, por difícil que este parezca, la encontramos cuando logramos entrenar la voluntad.

Fuerza de Voluntad

La fuerza de voluntad no es algo ilimitado, es algo que se va agotando mientras transcurre el día, es por ello que lo recomendable es hacer a primera hora de la mañana, las tareas o acciones que puedan requerir mayor energía, autocontrol y voluntad.

Compartimos cuatro consejos que te ayudarán a lograrlo.

1.- Tensión muscular

Iris W. Hung, de la Universidad de Singapur, ha descubierto un curioso truco para ejercer el autocontrol: si cuando notamos que se nos hace la boca agua ante un pastel tensamos los bíceps o los músculos de la mano durante un minuto, nos resultará más sencillo evitar la tentación. “La mente y el cuerpo están tan estrechamente unidos que simplemente apretando los músculos se puede activar la fuerza de voluntad”, concluía en la revista ‘Journal of Consumer Research’.

2.- Cambiar hábitos

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Case Western Reserve (EE UU), basta con pequeños cambios en hábitos cotidianos, por ejemplo lavarnos los dientes durante varios días con la mano contraria a la que solemos usar, para fortalecer la voluntad y que esos cambios se apliquen a otras actividades más complejas.

3.- Distracción

La distracción también es una buena estrategia, como han demostrado investigadores de la Universidad de Columbia (EE UU). Si tarareamos o pensamos conscientemente en otra cosa cuando algo nos tienta, nos costará menos controlarnos.

 4.- Meditar

El agotamiento y el estrés son elementos que disminuyen considerablemente nuestra fuerza de voluntad. Estudio neurocientífico publicado en el Journal of Neuroscience apuntan que; dos técnicas para lograr bajar los niveles de estrés son practicar algún tipo de meditación y/o hacer respiraciones lentas y profundas.

Alexander Caraballo

CEO de Kabbalah Coaching International School.

Neurohacker & Coach Ejecutivo y de Equipos

Máster en Neurociencias e Inteligencia Emocional

Miembro de Academy of Neuroscience & Education

Miembro de la International Association of Coaching